-
Cuando te lavas las manos, cuando te preparas una taza de café, cuando esperas el ascensor... en lugar de dedicarte a pensar, todas estas son oportunidades para estar ahí como una presencia quieta y alerta.
Cuando te lavas las manos, cuando te preparas una taza de café, cuando esperas el ascensor... en lugar de dedicarte a pensar, todas estas son oportunidades para estar ahí como una presencia quieta y alerta.