Dado que deseamos una larga vida, ¿no deberíamos tener en cuenta la vida eterna? Si anhelamos un reino que, por duradero que sea, tiene un fin, y una gloria y un gozo que, por grandes que sean, se desvanecerán, y unas riquezas que perecerán con la vida presente, y trabajamos por causa de tales cosas, ¿no deberíamos buscar el reino, la gloria, el gozo y las riquezas que, además de superarlo todo, son inmarcesibles e interminables, y no deberíamos soportar un poco de apremio para heredarlo?