Autores:
  • Hasta que tu personalidad no haya agotado su obsesión por dirigir el espectáculo, tu alma no tendrá espacio para expresarse. Tu personalidad puede sentirse amenazada por tu alma, porque tu personalidad ha controlado tu vida durante mucho tiempo y no quiere ceder el control. Tu personalidad es como un caballo salvaje que intenta despistar al jinete que intenta domarlo. El jinete es tu alma.