-
Dios es una inmensidad, mientras que esta enfermedad, esta muerte, que está en mí, este pequeño y apretado acontecimiento pedestre, es simple y perfectamente real, sin milagro ni instrucción.
Dios es una inmensidad, mientras que esta enfermedad, esta muerte, que está en mí, este pequeño y apretado acontecimiento pedestre, es simple y perfectamente real, sin milagro ni instrucción.