Sabemos que Europa adora al Presidente Obama. Las multitudes le adoran. La prensa adora a Obama. La pregunta es ¿cómo terminará esta cita? ¿De acuerdo? La pregunta es, ¿con qué fin? ¿Por qué aman al Presidente Obama? Aman su historia personal, aman a su esposa. Corea del Norte, China y Rusia realmente no se preocupan por los brazos de Michelle y, ya sabes, si le dieron un iPod a la Reina, ¿de acuerdo?