Autores:
  • Las buenas películas hacen que te preocupes, que vuelvas a creer en las posibilidades. Si en algún lugar del mundo del espectáculo de Hollywood alguien ha conseguido abrirse paso con algo que te habla, entonces no todo es corrupción. La película no tiene por qué ser genial; puede ser estúpida y vacía, y aún así puedes disfrutar de una buena actuación, o de una buena frase. El ceño fruncido de un actor, un pequeño gesto subversivo, un comentario soez que alguien suelta con cara de inocente, y el mundo cobra un poco de sentido.

    Pauline Kael (1994). “For keeps”, E P Dutton