Autores:
  • Si inventas a dos o tres personas y las sueltas en tu manuscrito, es inevitable que les ocurra algo: no puedes evitarlo; y luego te llevará el resto del libro sacarlas de las consecuencias naturales de ese suceso, y así, de buenas a primeras, ya tienes tu libro terminado y nunca te ha costado una idea.

    Mark Twain (1966). "Mark Twain's Satires and Burlesques", p.1, Univ of California Press