La América de Moctezuma y Atahualpa, la aromática América de Colón, la América católica, la América española, la América donde el noble Cuauhtémoc dijo: "No estoy en un lecho de rosas"- nuestra América temblando de huracanes, temblando de Amor: Oh hombres de ojos sajones y almas bárbaras, nuestra América vive. Y sueña. Y ama. Y es hija del Sol. Tened cuidado.