Autores:
  • La oración del santo más débil que vive en el Espíritu y se mantiene en armonía con Dios es un terror para Satanás. Los mismos poderes de las tinieblas son paralizados por la oración; ninguna sesión espiritista puede tener éxito en presencia de un santo humilde que ora. No es de extrañar que Satanás trate de mantener nuestras mentes ocupadas en el trabajo activo hasta que no podamos pensar en la oración.

    Oswald Chambers (2010). “Christian Disciplines: Building Strong Christian Character through Divine Guidance, Suffering, Peril, Prayer, Loneliness, and Patience”, p.158, Discovery House