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  • Sin embargo, cuando tienen la oportunidad, muchas personas eligen la cocaína antes que el amor. Yo no diría que sea una mala elección. Las endorfinas que se liberan durante el enamoramiento son similares a las de la heroína. OxyContin, "la hormona de los mimos", más frecuente en madres primerizas y recién casadas, es como el éxtasis; cada caricia produce un cosquilleo. Creo haberlo leído en alguna parte. El amor existe en polvo. El amor existe en pastillas. Todos somos adictos.

    Pete Wentz, James Montgomery (2013). “Gray”, p.7, Simon and Schuster