El ciclismo es tan duro, el sufrimiento es tan intenso, que es absolutamente purificador. El dolor es tan profundo y fuerte que una cortina desciende sobre tu cerebro....Una vez, alguien me preguntó qué placer me producía pedalear durante tanto tiempo. PLACER???? respondí. No entiendo la pregunta. No lo hice por el placer; lo hice por el dolor.