Autores:
  • ¿Quién no desearía una enfermedad que tiene entre sus síntomas un estado de ánimo elevado y expansivo, autoestima inflada, abundancia de energía, menor necesidad de sueño, sexualidad intensificada y -lo más relevante para nuestro argumento aquí- "pensamiento agudo e inusualmente creativo" y "aumento de la productividad"?

    Kay Redfield Jamison (1996). “Touched With Fire”, p.103, Simon and Schuster