Autores:
  • Cada persona tiene el poder de hacer felices a los demás. Algunos lo consiguen simplemente entrando en una habitación, otros saliendo de ella. Algunos dejan rastros de tristeza; otros, rastros de alegría. Algunos dejan rastros de odio y amargura; otros, rastros de amor y armonía. Algunos dejan rastros de cinismo y pesimismo; otros, rastros de fe y optimismo. Unos dejan huellas de crítica y resignación; otros, huellas de gratitud y esperanza. ¿Qué tipo de huellas dejas tú?