-
No olvidemos nunca rezar. Dios vive. Está cerca. Es real. No sólo nos conoce, sino que se preocupa por nosotros. Es nuestro Padre. Es accesible a todos los que le buscan.
No olvidemos nunca rezar. Dios vive. Está cerca. Es real. No sólo nos conoce, sino que se preocupa por nosotros. Es nuestro Padre. Es accesible a todos los que le buscan.