Autores:
  • Algunos hombres saben que un ligero roce con la lengua, que vaya desde los dedos de los pies de una mujer hasta sus orejas, y se detenga de la forma más suave posible en varios lugares intermedios, dado con la suficiente frecuencia y sinceridad, contribuiría inconmensurablemente a la paz mundial.

    Marianne Williamson (2013). “A Woman's Worth”, p.90, Ballantine Books