A menudo me preguntan: "¿Cuál es su momento favorito durante los 30 años que ha presentado [The Tonight Show]?". La verdad es que no tengo uno solo. Los momentos que más he disfrutado han sido los segmentos espontáneos, imprevistos, que simplemente ocurrían, como el infame "Tomahawk Toss" de Ed Ames, que produjo una de las risas más largas de la historia de la televisión. Cuando suceden estos momentos afortunados, te dejas llevar y disfrutas de la experiencia y del subidón del momento.