-
Que un hombre viva o muera en vano sólo puede medirse por la forma en que afronta sus propios problemas, por el éxito o el fracaso del conflicto interior dentro de su propia alma. Y de esto nadie puede saber salvo Dios.
Que un hombre viva o muera en vano sólo puede medirse por la forma en que afronta sus propios problemas, por el éxito o el fracaso del conflicto interior dentro de su propia alma. Y de esto nadie puede saber salvo Dios.