Autores:
  • El impulso a la confesión casi siempre requiere la presencia de un oído fresco y un corazón fresco; y en nuestros momentos de necesidad espiritual, el hombre con quien no tenemos más lazo que nuestra naturaleza común, nos parece más cercano que la madre, el hermano o el amigo. Nuestra vida familiar cotidiana no es más que un ocultarnos unos a otros tras una pantalla de palabras y hechos triviales, y los que se sientan con nosotros en el mismo hogar, son a menudo los más alejados de la profunda alma humana que llevamos dentro, llena de maldad no dicha y de bien no actuado.

    George Eliot (2013). “Delphi Complete Works of George Eliot (Illustrated)”, p.3786, Delphi Classics