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Cuando liberamos el potencial económico de las mujeres, elevamos el rendimiento económico de las comunidades, las naciones y el mundo... Cuando las mujeres tienen un mayor acceso a los puestos de trabajo y a la vida económica de nuestros países, se produce un efecto estimulante y multiplicador: Mayor estabilidad política. Menos conflictos militares. Más alimentos. Más oportunidades educativas para los niños... Aprovechando el potencial económico de todas las mujeres, aumentamos las oportunidades para todos.