-
Quien tiene un libro de todo lo que hacen los monarcas, Está más seguro de mantenerlo cerrado que de mostrarlo; Porque el vicio repetido es como el viento de varita, Sopla polvo en el ojo de otros, para esparcirse; Y sin embargo, el fin de todo se compra así de caro, El aliento se va, y los ojos doloridos ven claro Detener el aire los lastimaría.