Autores:
  • Vuestro Padre Celestial os ama, a cada uno de vosotros. Ese amor nunca cambia. No es influenciado por tu apariencia, por tus posesiones, o por la cantidad de dinero que tienes en tu cuenta bancaria. No cambia por tus talentos y habilidades. Simplemente está ahí. Está ahí para ti cuando estás triste o feliz, desanimado o esperanzado. El amor de Dios está ahí para ti, sientas o no que mereces amor. Simplemente, siempre está ahí.

    Publicación en FaceBook de Thomas S Monson del 07 de agosto de 2015.