Sin embargo, para beneficiarte, debes creer que la vida está tramando algo para ti. A menudo nos resistimos a este impulso emergente o a esta urgencia de emerger porque tenemos miedo al cambio, ¿verdad? Para el ego, el cambio equivale al peligro o a la muerte. Pero cuando negamos esta llamada evolutiva, se produce una presión interior que debe encontrar una salida, a veces de forma destructiva. Y esto puede estallar en forma de enfermedad, colapso financiero o ruptura de relaciones.