Autores:
  • Para los baules, la vida no es algo serio. Es diversión, es risa, es alegría. Así que en el mundo de los Baul no se puede encontrar nada parecido a la seriedad de un feligrés o a las caras largas de los llamados religiosos. Aman la risa, aman la diversión. Disfrutan de las pequeñas cosas con tremendo respeto. Normalmente, las religiones tienen caras muy largas, son muy sombrías, serias, porque tienen que serlo: están en contra de la vida.