La fotografía documental se está volviendo más ilustrativa a medida que la gente se familiariza con las limitaciones y vulnerabilidades de la fotografía. La realidad siempre se ha interpretado a través de capas de manipulación, abstracción e intervención. Pero ahora está muy a flor de piel. Me gusta esta honestidad sobre su deshonestidad. Toda fotografía tiene muchas verdades y ninguna. Las fotografías son ambiguas, por muy aparentemente científicas que parezcan. Siempre están sujetas a un contexto incontrolable. Es una afirmación manida, pero merece la pena repetirla.