-
Nunca tendremos una prosperidad libre de especulación hasta que aprobemos una ley por la que cada vez que un corredor o una persona venda algo, tenga que tenerlo en un cubo, o una bolsa, o una jarra, o una jaula, o una trampa para ratas, o algo así, dependiendo de lo que esté vendiendo. Estamos continuamente comprando algo que nunca obtenemos de un hombre que nunca lo tuvo.